Como el fraude, operando ferozmente desde el 12 de abril con la campaña del miedo y la manipulación de la opinión pública, no le alcanzó a la “organización criminal” para torcer la voluntad popular y evitar que Pedro Castillo sea elegido Presidente, hecho que está siendo reconocido internacionalmente por observadores y presidentes latinoamericanos.

Cuando su derrota electoral está cantada, KF y su maquinaria especializada en liquidar procesos democráticos, instituciones, honras personales e inundar de corrupción todo espacio, ahora viene con el cuento de la anulación de 802 Actas electorales, gastando más 800 mil soles dizque de “donantes”, con el único fin de burlar la voluntad popular y, fieles al estilo de la mafia política, hacerse del poder con leguleyadas.

Nadie puede dudar que, con esta torpe y cínica maniobra, apoyada y amplificada por los medios a su servicio, lo que pretende:

1.- Burlar la justicia peruana que ya tiene preparada la sentencia por 30 años de cárcel por lavado de activos y otros delitos cometidos por la “organización criminal” que dirige. Por eso, el pedido de prisión preventiva para KF es pertinente.

2.- Desconocer la voluntad popular afirmando cínicamente que defiende el “voto de millones de ciudadanos” cuando en realidad quiere eliminar los votos que le dan el triunfo a P. Castillo.

3.- Insultar la inteligencia de peruanos/as diciendo:

Que no cuestiona la labor de las autoridades electorales cuando, a todas luces, pone contra las cuerdas al ente electoral al exigirles pronunciamiento a favor de la anulación.

Que la arremetida legal “no es para defender el voto para KF”, cuando sabe perfectamente que, la eventualidad negada de anulación de las 802 actas, la convertirían en presidenta evitando que vaya a la cárcel.

Que “no quieren anular el proceso electoral” sino solo están pidiendo que se anulen los votos que convierten a Castillo en Presidente. Por supuesto, los “argumentos” para pedir tal anulación no tienen ninguna prueba.

Que “respetará como siempre” los resultados electorales. O sea, “respetará” como respetó el 2016 vacando a presidentes. Ese cuento ya lo conoce el Perú.

El pueblo está cansado de este personaje que inspira miedo, terror y corrupción. Las autoridades electorales tendrán que hacer su trabajo rechazando de plano la turbia pretensión de la “organización criminal”.

¡Fujimori nunca más! ¡Cárcel para Keiko y sus cómplices! ¡La defensa de la voluntad popular reclama unidad de las izquierdas!

Lima, 10 de junio de 202.

(Comunicado de Convergencia Socialista)